Bertolt Brecht
Eugen Berthold Friedrich Brecht, nació en Ausburg el 10 de febrero de 1898, siendo sus progenitores Berthold Friedrich Brecht y Sofie Brezing.
Su infancia transcurrió en el seno de un hogar burgués y acomodado ya que el padre era el director gerente de una fábrica de papel.
Una infancia libre de preocupaciones dio paso a una adolescencia rebelde que luego se agudizaría con un abierto enfrentamiento al sistema político de su país, contra la familia y la burguesía.
Dado que mostraba aficiones literarias, además, su padre pretendió encauzarle por el buen camino haciéndole estudiar medicina, estudios que no concluyó.
Durante la contienda de la Gran Guerra, como se llamó a la del 14, Bertolt Brecht trabajó de ayudante de médico durante poco tiempo, no legando nunca a combatir en el frente.
A los veinte años Brecht escribió el drama Baal, que horrorizó a su padre prohibiéndole que lo firmara con su nombre.
Más tarde, en 1922 el rebelde inconformista, recibirá el Premio Nacional de Teatro, por Tambores en la noche. Luego vendrá En la jungla de la ciudad y, en 1926, Un hombre es un hombre. Un año más tarde agrupa sus poemas en el Libro de plegarias domésticas.
Pero su consagración vino a raíz del estreno de La ópera de los tres cuartos, Die Dreigroschenopera, para Kurt Weill.
Por esta época, 1928, se hizo comunista, aunque más tarde puntualizara que nunca se había adherido al Partido Comunista pese a sus demostradas simpatías.
Siendo su vida en estos años –1918/1928-, muy activa en cuanto a creación literaria no lo es menos en lo concerniente a amores, ya que goza de una vitalidad envidiable. Así Paula Banholzer es la primera de sus mujeres, quien en 1919 le da su primer vástago, Franz; en 1922 contrae matrimonio con la actriz y cantante de ópera Marianne Zoff con quien tiene a sus hijos Hanne y Stefan.
Este marimono dura poco en realidad, ya que habiendo conocido a Helene Weigel en 1920, acaban convirtiéndose en amantes, tienen una hija, Bárbara, en 1924 y finalmente se casan cuatro años más tarde. Siendo éste su último matrimonio.
Posteriormente escribiría, entre los años 30 y 40, obras como Madre coraje y sus hijos, Vida de Galileo Galilei, El alma buena de Sezuan y El Círculo de tiza caucasiano.
Los acontecimientos políticos de su país le fuerzan a exiliarse de Berlín a Escandinavia, luego a la Unión Soviética, cruza el Océano Pacífico y recala en Los Ángeles.
Continúa escribiendo y ve algunas de sus obras representadas. Pero en 1947, tiene que irse de Nueva York debido a su comparecencia ante el Comité de Actividades Antiamericanas.
Después iría a Zurich, y más tarde a la República Democrática Alemana en donde vivió hasta su muerte, causada por un ataque cardíaco, el 14 de agosto de 1956 en Berlín.
Uno de sus legados artísticos más importantes, fue la Compañía Teatral Berliner Ensemble, fundada entre él y su esposa, la directora de teatro, Helene Weigel.
No podríamos cerrar este apunte biográfico sin dejar de mencionar sus historias del Señor K, pequeños relatos que encierran profundas fábulas morales.
El lenguaje de Brecht es casi siempre poco literario, áspero y directo, pero no se le puede negar su realismo e impacto, que son como un aldabonazo sobre la conciencia humana.